El 6 de mayo, la Asociación Europea de Energía Fotovoltaica publicó el informe Perspectivas del Mercado Solar Global 2025-2029, que analiza en profundidad el panorama de desarrollo del mercado fotovoltaico global y pronostica las tendencias del sector para los próximos cinco años. Este informe presenta varias conclusiones clave.
En primer lugar, la capacidad fotovoltaica instalada a nivel mundial sigue batiendo récords. En 2024, la capacidad fotovoltaica instalada a nivel mundial alcanzó un nuevo récord de 597 gigavatios (GW), lo que representa el 81 % de la nueva capacidad de energía renovable añadida a nivel mundial. A finales de 2024, la capacidad fotovoltaica instalada acumulada a nivel mundial alcanzó los 2,2 teravatios (TW), equivalentes a 2200 GW. Tan solo dos años después de alcanzar el primer hito acumulado de 1 TW en 2022, se superó la segunda marca de 1 TW. Cabe destacar que la capacidad instalada añadida entre 2023 y 2024 igualó la capacidad instalada total de los 70 años anteriores.
En segundo lugar, existe una diferenciación significativa entre los mercados regionales. La región Asia-Pacífico ha consolidado continuamente su posición dominante, aportando el 70 % de la nueva capacidad global y alcanzando una tasa de crecimiento anual del 37 %. Mientras tanto, América y Europa registraron tasas de crecimiento del 40 % y el 15 %, respectivamente. Por el contrario, Oriente Medio y África fueron las únicas regiones que experimentaron una caída interanual del 2 % en 2024.
En tercer lugar, China se mantiene como líder mundial en el mercado fotovoltaico. En 2024, la nueva capacidad instalada de China estableció un nuevo récord con 329 GW, lo que representa el 55 % del total mundial. Esta magnitud es más del doble de la suma de Estados Unidos (8 %), India (5 %), Brasil (3 %) y Alemania (3 %).
Finalmente, la industria se enfrenta a la presión del ajuste de la tasa de crecimiento en el futuro. A largo plazo, la disminución de los precios de coste, la aceleración del proceso de electrificación y la demanda de seguridad energética constituyen los tres principales motores del crecimiento de la capacidad fotovoltaica instalada. Sin embargo, a corto plazo, el desarrollo se ve limitado por múltiples riesgos, como el retroceso de las políticas energéticas fósiles, las fluctuaciones macroeconómicas y la evolución del panorama geopolítico. Según las previsiones institucionales, se espera que la nueva capacidad fotovoltaica instalada alcance los 655 GW en 2025 y supere el objetivo de 1 TW para 2030.
En conclusión, a pesar de los desafíos a corto plazo, el mercado fotovoltaico mundial muestra una prometedora tendencia de crecimiento a largo plazo, con China desempeñando un papel crucial a la hora de impulsar su desarrollo.